VIGNON PÈRE ET FILS

El champagne Vignon Père et Fils comienza varias generaciones atrás, pero la familia
retoma el arte de la vinificación en 1946.
La explotación comprende 5,84 hectáreas esencialmente situadas sobre los terrenos
Grand Cru de Verzenay y Verzy. La producción no está todavía clasificada como Bio, biodinámica
o viticultura razonable, pero una certificación sostenible está en curso. Los abonos son
Bio, los tratamientos son a base de cobre y azufre y no contienen productos tóxicos ni cancerígenos.
Una pequeña parte del viñedo se trabaja de nuevo a caballo, un proyecto de CUMA
(Cooperativa de Material Agrícola).
En la bodega, intervenimos lo menos posible en el proceso natural del vino. La vinificación
se realiza en barrica de roble. Las levaduras son naturales y no se practica ni
la clarificación ni filtración para la mayoría de los cuvées. El champagne se envejece en barrica
de roble en una bodega del siglo XIX de piedra caliza y ladrillo.
La chaptalización es prácticamente inexistente. Trabajamos a la manera más tradicional
“champenoise” lo que nos permite ofrecer a los amantes del champagne una gama de cuvées
donde el “terroir” de Verzenay y Verzy transmite su poder, su vinosidad así como notas de frutos
rojos y blancos, típicos del terreno de Verzenay.
Un arte antiguo sobre un Grand Cru histórico de la Champagne para un gran placer de los paladares.

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